El parto es un evento natural y fisiológico, culminación del largo proceso del embarazo, lo que supone un esfuerzo y un desgaste para el organismo de la madre. La recuperación total puede llevar cierto tiempo y, por ello, es conveniente que busques acelerarlo y optimizarlo mediante la utilización de algún método terapéutico, como lo es la kinesiologia.
Constituye un grupo de disciplinas que estudia el movimiento del cuerpo humano. Como kinesiólogos nos ocupamos de preservar y mejorar las capacidades y funciones del organismo.
Efectos beneficiosos después del parto
Embarazo y parto conllevan modificaciones que producen sobrecargas en ciertas estructuras anatómicas. Entre ellas, el suelo pélvico y la pared abdominal que han sostenido el peso del útero grávido y se han sometido a elongaciones y presiones durante el parto. Otras importantes repercusiones se dan sobre la musculatura de la espalda, por el peso adicional que presenta la madre durante varios meses. Podemos ayudarte a prevenir muchas afecciones, como la incontinencia urinaria o los dolores de espalda, y la kinesiologia obra al respecto varios efectos.
– Una buena relajación es importante para que logres un descanso reparador y para controlar el dolor.
– El piso pélvico y la pared abdominal pueden recobrar más rápidamente su tono muscular, con lo que se previenen en buena medida problemas de relaciones sexuales dolorosas, prolapsos e incontinencia.
– Se favorece una cicatrización más rápida.
– Tonifica, flexibiliza y relaja la musculatura del dorso, la zona lumbar y las piernas.
– Fortalece el sistema musculoesquelético en su conjunto, adecuándolo para la posición sostenida que implica la lactancia, y para cargar al bebé sin fatiga.
– Mejora tu estado de ánimo y la autoestima.
– Ayuda a recuperar el peso normal y reabsorbe los edemas.
Con las prácticas de kinesiologia avanzada aunamos la prevención y la recuperación en una misma actividad. Recuerda que tu salud siempre es más fácil de cuidar desde las medidas preventivas.