La palabra kinesiologia proviene del griego antiguo y supone la unión de “kinesis” (movimiento), y “logos” (estudio). De este modo, es fácil llegar a la conclusión de que la kinesiología supone el estudio del movimiento.
Esta disciplina supone una herramienta fundamental, por tanto, a la hora de evaluar y analizar acciones dentro del deporte, (ya sea para mejorarlas o para corregirlas), pero también es una gran herramienta para tratar los diversos problemas que pudieran surgir como vicios o tics.
Para ello, esta rama de las ciencias abarca el saber de diversas ciencias, para así conseguir un conocimiento integrador de todas ellas. Anatomía, fisiología y biofísica son la base en la que se sustenta todo el trabajo del kinesiólogo.
Dentro del deporte, la kinesiología es una herramienta imprescindible, la cual permite tratar dolores, recuperar o perfeccionar el esquema corporal, evitar lesiones o tratarlas, perfeccionar patrones de movimiento, de coordinación o de gestos deportivos, colaboración entre sistemas o reducción del tiempo de recuperación.
El rol de kinesiólogo
Como se acaba de mencionar, se trata de una herramienta clave en el desarrollo del deporte, no solo de competición profesional, sino también a nivel amateur o de ocio. Supone una ayuda inestimable al deportista en las diversas etapas del entrenamiento, desde la pretemporada hasta el momento de la recuperación.
El trabajo no se lleva a cabo de manera individual, sino que se trata, como todo en el deporte, de un campo interdisciplinar, en el que se necesitan los conocimientos y experiencias de otros profesionales como fisioterapeutas, nutricionistas y médicos. De esta manera, se asegura una visión global del deportista.
En definitiva, el kinesiólogo se ha ensalzado como una figura clave dentro del equipo técnico deportivo dadas sus aportaciones. Está comprobado que el rendimiento deportivo aumenta exponencialmente con la ayuda de estos profesionales.
Y tú, ¿qué opinas de la kinesiologia?